Desde que leo a Carlos Guadian he ido aprendiendo un poco sobre gobierno electrónico, sobre el uso de las nuevas tecnologías para mejorar las administraciones públicas. Ejemplos como la web del ayuntamiento de Barcelona (pero también el de muchas otras administraciones, como también la Agencia Tributaria) que permite realizar decenas de trámites de forma directa y que permite la introducción de instancias de mantenimiento y mejoras urbanas directamente por la web (con un protocolo de actuación y respuesta detrás de cada instancia), son ejemplos de cosas que ya están haciendo las administraciones.

Pero es verdad que hay herramientas de la web 2.0 y de las redes sociales que permiten el cambio en las organizaciones y como no, también en las administraciones públicas. Me he dedicado más a hablar del ciberactivismo o por mi profesión a trabajar el cibersindicalismo y las campañas “dospuntoceristas” de la web 2.0 para que la UGT de Catalunya intente aprovechar estas redes sociales para mejorar su capacidad de interactuar y mobilizar a los ciudadanos.

En cambio y a pesar de su alto interés el tema del e-government con las herramientas de la web 2.0 no lo he analizado. Y es interesante analizarlo, ya que los nuevos movimientos sociales vecinales comienzan a tener formas que tal vez desde el “dospuntocerismo” se pueda atacar. Los de autoritas (empresa en la que está el antes citado Carlos Guadian) han elaborado un vídeo que explica que es eso del e-government con las herramientas 2.0, a parte de ser un vídeo promocional de sus servicios (no dejan de ser una empresa y buscan su negocio) sí que para mí explica de forma bastante clara que es lo que, a grandes rasgos, son los retos para las administraciones públicas el entrar en esto de la web 2.0.