Lo que no cuentan los analistas de bolsa: Aunque las bolsas del mundo tengan recuperación el empleo sigue siendo destruido

Al finalizar del año aparecían diversas entrevistas a decenas de analistas de bolsa y empresarios del sector que indicaban lo mal que estaba España debido a que era de los pocos lugares donde la bolsa no se recuperaba. Que la economía especulativa e inversora que se mezcla en lo que es la bolsa vaya bien, es bueno, seguramente genere confianza y las inversiones que las empresas necesitan hacer para generar empleo se puedan dar. Pero por sí solo no es indicador que la recuperación afecta a todos.

Esta crisis, generada por la misma economía especulativa y los fallos de las agencias de control, ya comienza a ser superada por los mismos especuladores que nos metieron en ella. Sus inversiones bursátiles comienzan a ir bien, la bolsa sube y todo parece ir viento en popa.

Si miramos los principales indicadores en su evolución en los últimos 6 meses vemos como todos ellos evolucionan de forma positiva:

La evolución de los índices bursátiles parece que van bien, más o menos se están visualizando unos 6 meses de recuperación en los principales índices y aunque ni de lejos ha recuperado las caídas de todo el 2008 sí que se observa que ha habido un punto de inflexión a mitad del 2009 y la bolsa comienza a recuperarse (caso a parte es la bolsa española).

Bien, pues esta recuperación no es más, por el momento, de espectativas y especulativa, porqué la economía real no está generando empleo. La economía real, que depende también de la espectativas e inversiones, aún no ha visto llegar la recuperación. Si miramos los datos de evolución del desempleo en los principales países europeos y las principales economías occidentales este aún no ha comenzado a notarse su recuperación.

Evolución del paro harmonizado en la UE-27, Japón, EEUU y Noruega. Excepto Japón y Noruega el resto de países y economías siguen una evolución negativa del paro no sólo desde el 2008 sinó analizando el parcial del último semestre. Datos Eurostat.

Cuando leamos en la prensa económica que la economía se está recuperando en el resto del mundo, y sobretodo, con la intención de compararlo con España, que no nos vendan la moto. La economía se está recuperando para algunos, para la inmensa mayoría la crisis sigue dando serios coletazos de destrucción de empleo en la mayoría de economías del planeta, incluyendo EEUU y como no, España.

Este 2010 será posiblemente el que marque segunda fase de la crisis, en la que aún no hemos tocado suelo en la mayoría de economías a la destrucción de empleo, pero sí que hay recuperación en la economía de la espectativa y en las bolsas. El Euribor volverá a subir porqué ya ha comenzado a moverse la bolsa y veremos como será el momento más duro para los trabajadores y autónomos.

Sí, hay luz al final del túnel, pero por el momento unos pocos, basicamente los que nos han metido en el túnel, se la están quedando toda para ellos. Lamentablemente tardaremos aún, en ver recuperación del empleo, y esto no tiene que ver ni con la flexibilidad laboral, ni con reformas laborales (necesarias o no), sinó con la propia estructura del sistema económico, que deja en manos de unos cuantos (no unos pocos, pero sí una inmensa minoría) el juego de las finanzas con unos controles limitadísimos y un casi nulo retorno fiscal a la sociedad, que hace que si ellos nos meten en una crisis (con ayuda por activa o por pasiva de todos los que han tenido algún ahorro y lo han invertido en ladrillo o se han dejado arrastrar a meter sus ahorros en proyectos especulativos), los primeros en salvar el culo sea a ellos mismos.

En definitiva, si el 2008 fué el año del talegazo financiero, el 2009 el de la mayor destrucción de empleo de los últimos 20 años, el 2010 se augura como el de la recuperación para algunos pero que tardará en traducirse en la recuperación de la economía para la mayoría.

Como mínimo nos queda el consuelo de poder decirles a todos estos analistas de bolsa, que “su economía” no siempre coincide con “nuestra economía” y que hay intereses “de clase” entre los que dependemos económicamente de que la economía industrial e inversora funcione bien y genere empleo, y los que dependen económicamente que la especulativa y de espectativas funcione bien y genere dividendos. Que aunque ambas vayan ligadas (la economía inversora depende bastante de la especulativa), no siempre son coincidentes ni en intereses ni en su evolución.