An inconvvenient Truth, el film denuncia sobre el cambio climático producido por Al Gore, marcó un antes y un después en la percepción que todos teníamos sobre la problemática producida por el calentamiento global. Gore tuvo el acierto de exponer de manera nítida y cruda, las nefastas consecuencias que sobre el medio ambiente representa el modelo productivo y de consumo desaforado al que nos hemos entregado desde el siglo pasado.

La gran virtud de la denuncia de Al Gore fue sin lugar a dudas permitir acercar al entorno más próximo los fenómenos por él descritos, a nuestro día a día particular. Pocos de nosotros tendremos como primera imagen del día la imponente masa de hielo del Ártico derritiéndose o las extensas masas forestales de abetos gigantes norteamericanos achicharrándose desde las raices por la modificación de la composición del subsuelo que los nutría, pero sí que estamos padeciendo por ejemplo los efectos de una sequía a la que ya entendemos como “normal”, cuando no debería ser así. Gore tuvo el acierto de convertir el problema en mediático, de penetrar en nuestos hogares y concienciar a la masa que hasta la fecha había permanecido desinformada y dormida y los poderes económicos causantes de los destrozos no se lo perdonarán en la vida.

Los detractores de quienes como Gore defienden la teoria del cambio climático, los negacionistas, se articulan en los entornos del poder económico y político neocon, son curiosamente quienes en pocos años han diseñado, implantado y extendido el modelo de consumo y producción que ha provocado que todos tengamos un problema mayúsculo, cultivos de alimentos tratados genéticamente, estructuras de producción altamente contaminantes, consumo incontrolado de recursos naturales que no hacen otra cosa que acercarnos cada día un poco más al abismo.

Defienden un componente cíclico natural, que sin dejar de ser cierto, incrementa en cada fase el peligro de desertización que ya está llamando a nuestras puertas, la destrucción de la capa de ozono cuya incidencia en nuestra salud ni ellos mismos niegan y un aumento de las temperaturas que de seguir igual, provocará cambios importantísimos en los equilibrios ecológico, hasta convertir el planeta en una especie de horno de pastelero. Es cierto que la temperatura global en una primera fase y como average está disminuyendo, pero lo que no nos cuentan es que eso se debe al fenómeno del deshielo. ¿Qué pasará cuando se haya derretido toda la capa acumulada en los polos?.

Me niego a aceptar que ese ánsia por el crecimiento desaforado, no acepte ni tan siquiera el riesgo. Los mismos que nos presentan como coartada el fenómeno de la mundialización en su vertiente económica, deberían tener presente que no pueden apostar por seguir destruyendo el medio que nos soporta, no se puede beber si no hay agua, ni respirar sin aire ni andar sin suelo.
Eso debería entenderlo hasta el primo de Rajoy.

Eduard Díaz es un bloguero relevante de la girosfera y de la catosfera, su blog www.edp.cat es un referente de la girosfera. Ha impulsado un crossblogging que hasta el momento ha sido el de mayor éxito (aunque la idea es de otro girosférico, Jose Antonio Donaire). Entre su formación académica nos encontramos un postgrado sobre Gestión TIC y su implementación en las organizaciones y es jefe de ventas y de Telefónica S.A. a parte de un ciberactivista político clave de la catosfera.

Como detalle es un aficionado a la montaña con el que espero algún día hacer algún pico o alguna salida senderista.