La semana pasada la UGT Confederal presentaba un informe sobre la devaluación salarial en todos los sectores para responder la muy desafortunada frase del ministro Montoro que decía que los salarios “no estaban bajando sino moderando su subida”.
Reforzando la versión de que los salarios sí han bajado, UGT de Catalunya, ha publicado un informe “Les retallades salarials: per la reforma laboral i la congelació salarial“, que analiza la devaluación salarial en una muestra de empresas grandes y medianas-grandes que emplean a un total de 32.000 trabajadores.
La muestra es en empresas grandes y sindicalizadas y el resultado de la devaluación salarial es aún mayor que en la media de empresas. Seguramente porqué en estas empresas la devaluación interna ha ido más por la aplicación de reducciones de salarios, reducciones de jornada y ERE temporales, en lugar de la destrucción de empleo, no porqué funcionen peor.
Para poder conseguir la demanda de Garicano, Fedea, Politikon, et. al. de que una parte de la devaluación interna vaya más por la vía de la reducción de salarios que de la destrucción de empleo, hubiéramos necesitado mayores tasas de sindicación y presencia sindical y empresas más grandes.
De este informe se puede hemos extraído la siguiente infografía, que muestra de forma visual la dimensión de la devaluación salarial de la muestra de empresas analizada.
En concreto creo que el comentario, no recuerdo ahora si era de Politikon o de Fedea, era que en empresas grandes con convenio colectivo propio resultaba más fácil llegar a acuerdos que flexibilizasen las condiciones de una manera aceptable para todos, mientras que en empresas pequeñas y medianas que se referenciaban al convenio sectorial, esto resultaba mucho más complicado y el coste de esa rigidez era una mayor destrucción de empleo.
Jose, esto concuerda con lo que tú dices, pero abre también otras posibilidades de discusión. Por ejemplo, los acuerdos a los que los sindicatos han podido llegar en algunas de esas grandes empresas han sido en la forma de integrar en los convenios modificaciones automáticas (asumo que tanto al alza como a la baja) de los salarios dependiendo de la rentabilidad de la empresa. Esto se describe por ejemplo en un artículo de Roger Senserrich en Politikon (en el que por cierto te menciona, Jose):
http://politikon.es/2013/02/05/convenio/
Se podía discutir, por ejemplo, si este tipo de acuerdos con ajustes automáticos se puede realizar a nivel sectorial o si la diversidad de las características de las empresas hacen que sea dificil o imposible. Por otra parte, también se podría pensar que exite un limite máximo al numero de trabajadores cubierto por un convenio genérico (sin que hubiera uno más específico por debajo que lo complemente) para que dicho convenio resulte eficiente.
Visto de esta forma, no sólo se resalta la labor de los sindicatos para llegar a acuerdos aceptables por todas las partes, sino que podría tener efectos en la organización de éstos, por ejemplo si el ámbito de aplicación de los convenios cambiase y “sector del metal”, por decir algo, se considerase demasiado amplio.
Demóstenes:
Lo que los amigos de FEDEA y Politikon ignoran es que se negocia no donde y al nivel que se queire, sino donde tienes infrastructura e interlocutores para hacerlo.
Desde el sindicato, a menos UGT de Catalunya, apostamos más por los convenios provinciales que por los autonómicos (que casi no existen) o los estatales, precisamente por la proximidad de los negociadores a la realidad local, o bien los de empresa. Siempre preferimos un convenio de empresa a los de sector (entre otras porqué logras mejorar muchas más cosas y adaptarlo a la realidad de esa empresa en concreto), pero el tema no es lo que quieras, sino lo que puedes hacer.
Si no hay interlocutores (la patronal está muy fraccionada, o simplemente no hay patronal organizada) o no tienes estructura negociadora (es un sector muy pequeño o tan poco sindicalizado que ha de heredar un convenio de rango territorial superior) o simplemente la patronal se niega a negociar a nivel más cercano (convenio de la seguridad privada), pues no puedes negociar a un nivel más bajo y la alternativa no es “ala convenios de empresas para todos” sino ausencia de convenios.
En efecto, esto aplica a los sindicatos, de quienes estábamos hablando en la entrada, pero evidentemente también a su contraparte en las negociaciones, como la patronal. Y una cosa es lo ideal y otra, como comentas, la realidad. Ahí tienes toda la razón.
En cualquier caso, creo que esta bien comentar de vez en cuando estas restricciones de tamaño y homogeneidad del ámbito de aplicación, porque la gente (y me incluyo), en general, ni se lo plantea.
Y en particular lo que me preguntaba es si este tipo de medidas, que parece razonables, no se están incorporando a convenios superiores al de empresa sólo por la dificultad en poner de acuerdo a muchas partes para modificar el convenio (por lo que puede aparecer en él antes o después) o si el condicionante principal es la diversidad entre las empresas que serían afectadas que lo imposibilita a ese nivel.
Date cuenta de que si algo así estuviera en los convenios sectoriales, no se necesitaría cambiar acuerdos para realizar estos ajustes, por lo que en principio al menos se atenuaría ese efecto de falta de flexiblidad en la negociación en las PYMES del que hablaban en Fedea. Igual es una tontería, pero así de primeras me parece una cuestión interesante a largo plazo (para esta crisis me temo que ya llegamos tarde).
Ojo, Demóstenes… el estudio no se centra sólo en convenios, sino en el salario real que tienen esos trabajadores. El convenio ha disminuido el salario nominal en pocos casos (lo ha dejado congelado en la mayoría), lo gordo en la reducción de salario nominal ha venido por acuerdos de reducción de jornada, o bien por ERE temporales.
Para estos acuerdos requieres actores, por narices, que puedan negociar a nivel de empresa.
Para reducciones de jornada y EREs temporales si, por supuesto, se necesita negociar a nivel de empresa. Por eso estaba pensando más en la linea de los salarios nominales.
Es cierto que los ejemplos que cita Roger en este sentido se basan en congelar salarios y dar una paga extra no consolidable sólo si se alcanzan ciertos objetivos. Pero en la práctica eso es bajar el salario real ajustado por inflacción en un caso y mantenerlo o subirlo en el otro. Esos ejemplos tienen límites concretos y específicos para cada grupo empresarial, pero se podría generalizar por defecto en función de los beneficios del año anterior.
No estoy pensando en una solución mágica que sirva para solucionar el problema de la rigidez en la negociación colectiva, sino sólo en una medida paliativa, una primera forma de ajuste para variaciones relativamente pequeñas de las condiciones salariales. Eso no implicaría, claro está, que no se pudieran acordar otras cosas sin de forma más particular para casos más graves.
Ten en cuenta que la caida de los salarios es algo relativamente reciente y abrupto. Según datos de la OCDE, en los primeros años de la crisis (2007-2009) los costes laborales unitarios se siguieron incrementando por encima de la media de la zona euro y de la OCDE, y no fue hasta 2010 que empezaron a bajar. En 2012 estábamos más o menos igual que en 2007 de nuevo y seguimos cayendo, mientras que la media de la UE ha vuelto a crecer. Cabe plantearse en que situación estaríamos ahora si el ajuste salarial hubiera comenzado mucho antes y de forma más suave.
Demóstenes:
No me atrevo en los comentarios analizar el mejor sistema para mejorar la negociación colectiva. Cuanto más sé de este tema, menos me atrevo a hacer propuestas. Ahora mismo, por capacidad de decicación y energías me conformo con apuntar algunas de las realidades encontradas y facilitarlas a los que aún tienen tanto valor para ello. Quería elaborar un artículo para este octubre precisamente sobre ello, pero lo he desestimado.
Con ello no digo que tus ideas y propuestas estén desencaminadas, ni mucho menos, simplemente que me conformo con aclarar como se han conseguido estos datos y lo que puedan significar.
Jose,
Ok, perfecto. Desde luego, no era mi intención tampoco cambiar el sistema de negociación colectiva desde aquí. Quizá solo lanzar preguntas al aire (si, lo se, lo siento, se que es secuestrar un poco tu blog, pero me ha parecido relevante)
Un saludo
Demóstenes:
Tus comentarios son pertinentes, simplemente yo no me atrevo ahora a valorar las propuestas que planteas, quería aclararlo, para explicar que eludo el debate conscientemente, pero aclararte que no ignoro tus comentarios o paso de ellos.