Hace poco el gobierno de la ciudad de Barcelona liderado por Jordi Hereu firmó el Pacte local per l’Ocupació de Qualitat 2008-2011 firmado por el gobierno de la ciudad (PSC, ICV), ERC, el Departament de Treball de la Generalitat y los principales agentes sociales de la ciudad: UGT de Catalunya, CCOO del Barcelonés, Foment del Treball y Pimec.

El Pacto que estaba abierto a que entraran también los otros dos grupos de la oposición fué firmado sin que CiU ni el PP quisieran sumarse. El Pacto es la continuación de un Pacto más coyuntural que se realizó en Mayo del 2008 para introducir medidas de contención contra la crisis.

El Grupo Municipal de CiU justifica que no firma el Pacto porqué el ayuntamiento fracasa a la hora de impulsar el empleo en la ciudad.

Es curioso que se diga esto, porqué la ciudad de Barcelona tiene una tasa de desempleo que ronda el 9% (la mitad del estado español, e inferior a la del 16% que tiene Catalunya), y aunque ha aumentado en el último año (hay ahora unos 30.000 desempleados más que en octubre del 2008), no es la ciudad que más ha sufrido la destrucción de empleo.

Curioso también porqué las administraciones pueden poner medidas para combatir el desempleo (generándolas ellas, dando ayudas, haciendo políticas expansivas de gasto público, etc…) pero no lo pueden hacer solas sin tener en cuenta que la mayor parte del empleo lo ha de generar el sector privado. Por eso un acuerdo que han firmado las patronales y los sindicatos de la ciudad responde generalmente al interés de la economía y de la creación de empleos. CiU al quedarse fuera renuncia a sumarse a un consenso en el que están los agentes sociales y se considera más sabio que estos a la hora de generar políticas que impulsen el empleo.

Por otro lado, las alternativas que plantea CiU a un acuerdo que en su primera versión ya ha actuado sobre 61.000 barceloneses, es poco concreta. Las propuestas concretas y que suponen un compromiso de verdad están recogidas en el texto del Pacto. Que también recoge un informe del trabajo realizado.

El estado de cumplimiento es alto (un 85%). Por citar una, la primera:

Medida 1 Barcelona capital emprenedora

Resultados previstos: 770 empreses creades i 450 en creixement
Resultados conseguidos: 800 empresas creadas y 312 en crecimiento.

Por eso este Pacto no se construye en el vacío sinó en el cumplimiento del ya existente. Cosa que CiU sólo aporta dudas y quejas pero ninguna propuesta realmente sólida.

¿Pero es que CiU es capaz de impulsar políticas de empleo mejores que las que impulsa el ayuntamiento de Barcelona?

Ya sabemos que lo más probable es que no, ya que su negativa a firmar un pacto con los agentes sociales, les deja fuera de un consenso necesario para impulsar cualquier política activa de empleo (o eso, o CiU realmente cree que los sindicatos y las patronales firmarían cualquier cosa pero son tan cobardes que no se atreven a decirlo).

Pero de una forma científica no podemos saberlo ya que es imposible poner en marcha hacia atrás la moviola, sustituir en enero del 2008 a Hereu por Trias y que apliquen su programa.

Lo que sí, en cambio, podemos hacer es comparar como ha evolucionado el empleo y el desempleo en una ciudad emblemática donde gobierna CiU, en el ámbito de la primera corona de Barcelona (por tanto que se beneficiaría de los efectos de capitalidad, tendría un entorno industria y empresarial parecido, un acceso a los recursos de logística, etc… parecido), con cómo lo ha hecho en Barcelona.

La ciudad que escojo para ello es Sant Cugat que es fronteriza con Barcelona que tiene a una distancia parecida los mismos recursos logísticos y de acceso que pueda tener la ciudad de Barcelona y que los efectos de capitalidad también se contagian, con suficientes recursos como para poder hacer políticas activas propias y tener iniciativas municipales y además que gobierna CiU con una soberana comodidad desde hace muchos años.

Comparando la capacidad de aguantar el tirón de destrucción de empleo podemos ver cómo este ha acelerado más en Sant Cugat que en Barcelona.

En Octubre del 2008 el desempleo en la ciudad de Barcelona era de unas 68.000 personas, mientras que en Octubre del 2009 subía a casi 98.000 personas, un aumento del 43%. Mientras en Sant Cugat los desempleados pasaron de 2.300 a casi 3.700 en el mismo período, un aumento del 56%.

Datos de creación de empleos del INEM y de población del IDESCATD

La capacidad de generar empleo es también un indicador de la capacidad de afrontar la lucha contra el desempleo. En este último mes en la ciudad de Barcelona ha generado 74000 nuevos contratos, 46 por cada 1000 habitantes. Sant Cugat ese mismo mes ha generado casi 2900 nuevos contratos, 38 por cada 1000 habitantes. Es evidente que la ciudad de Barcelona es más capaz de generar empleo que Sant Cugat.

¿Pero es debido a una diferencia de la riqueza de la ciudad?. Una ciudad con mayor riqueza por cápita teóricamente tiene más recursos para que los emprendedores generen actividades, o para que se genere empleo, si analizamos el PIB por cápita de ambas ciudades en el 2001, último dato publicado por el IDESCAT, Barcelona tenía un PIB por cápita de 27.300 € frente a un PIB por cápita de Sant Cugat de 26.900€. Aplicado a la población actual (con las distancias prudenciales ya que podría haber variado mucho el diferencial de PIB por cápita entre Sant Cugat y Barcelona, aunque no hay datos que lo abalen), la capacidad de generar empleo por unidad de PIB en Barcelona respecto a Sant Cugat es un 15% más eficaz en Barcelona.

Pero ¿y la calidad del empleo?, si buscamos la generación de empleos fijos en el último mes del que tenemos datos, Barcelona ha generado 10.324 contratos indefinidos respecto a los 388 que ha generado Sant Cugat, es decir Barcelona ha generado unos 6 contratos indefinidos por cada 1000 habitantes, frente a los 5 por cada 1000 habitantes que ha generado Sant Cugat.

Evidentemente los datos apuntan en un sentido, Barcelona al final, no ha aumentado tanto como Sant Cugat el número de desempleados, es más capaz de generar más empleo por ciudadano y por unidad de PIB y además genera más empleo de calidad por cápita del que genera Sant Cugat.

Definitivamente, nada indica que las políticas de CiU sean más eficaces que las que impulsa el gobierno de Barcelona a la hora de crear empleo. Lo cuál me lleva a preguntarme si realmente su no firma del Pacto de Ocupación responde más a que no es que sean más listos que la patronal y los sindicatos o el propio gobierno municipal sinó a su estrategia electoralista de sumarse a decir que NO a cualquier propuesta municipal.