El PSC está secuestrado y ya no hay mecanismo para que se libere que los que lo han secuestrado sean generosos. Las personas que podrían organizar mayorías alternativas se han marchado y tampoco es que hayan demostrado una gran capacidad estratégica para aglutinarse. Esa opción ya pasó, cada vez el poder está menos repartido y en menos manos y con menos capacidad de articular una oposición.
La actual dirección ha llevado al extremo las prácticas de centrifugación de militantes y cuadros, de dirigentes que tienen opiniones distintas y de personas que no quieren repetir las mismas formas de hacer la política.
Hoy Rubalcaba reconoce la derrota electoral (con el 23% de los votos) y convoca congreso extraordinario. Aunque intentará controlar el proceso desde atrás, como mínimo ya no será él y su entorno más inmediato el que controle el PSOE. Tiene la decencia de tener que retirarse y ceder espacio y juego para terceros… incluso con unas primarias abiertas para seleccionar al candidato a las generales.
En cambio Pere Navarro decide convocar un Consell Nacional. El órgano más clientelar del PSC (más clientelar incluso que la ejecutiva nacional) para decidir “que hacer”. Otra nueva llamada a la unidad, otro nuevo golpe de pecho interno para darse fuerzas mútuas, otra ratificación de que es el mundo el que se equivoca y no ellos. El “Consell Nacional” que hoy sólo es un órgano formal para ratificar con lustre democrático la decisión que toman como mucho 10 personas. Hacernos creer al resto que con eso pone en balance su gestión es tomarnos por idiotas. Tal vez en su entorno más inmediato se crean que el Consell Nacional representa algo más que al puro aparato del partido, fuera de ese entorno inmediato (cada vez más reducido) el Consell Nacional no es más que un status quo con una enorme proporción de voto clientelar a nivel de salarios o de cargos que ha demostrado por activa y por pasiva la incapacidad manifiesta para adaptarse a la realidad.
Rubalcaba como mínimo tiene la vergüenza de cargar con su responsabilidad y dar paso a un congreso extraordinario.
Lo único que les mueve a la mediocre dirección del PSC y los que controlan los resortes de poder interno es salvar su culo profesional, seguir cobrando, tener el riñón cubierto y tirar para adelante. Tener según que sueldo del área metropolitana, de la diputación o de alguna alcaldía es muy suculento. Estos mediocres de medio pelo tienen el talento suficiente para seguir controlando el partido, a través de las pequeñas migajas de poder que aún le queda al PSC para repartir prebendas y sueldos, pero en el frío mercado laboral sin su red clientelar de apoyo muchos se comerían literalmente los mocos.
Estamos en crisis, entiendo que hace mucho frío afuera, algunos con su currículum no encontrarían trabajo en 10 años, pero un partido político no puede estar secuestrado por unos pocos, por mucho que controlen los resortes de poder interno.
Que digan su precio, que digan por cuanto liberarían al PSC, cuánto tenemos que pagar el resto de militantes y votantes del PSC para que marchen, para que dimitan, para que dejen de controlar esos resortes del poder que sólo sirven para eso… para reproducir su posición interna, pero que carecen de valor fuera.
El PSC esté secuestrado ahora mismo para mantener a 10 famílias. La única solución que se me ocurre es que les encontremos curro, que entre todos, hagamos una cuestación para que tengan una salida profesional digna y ofrezcamos ese rescate. Si es que vale la pena rescatar al PSC.
Que triste me parece… aunque me temo que es verdad… y a medida que tenga menos capacidad para generar empleos y mantener clientelas, más rápida será la debacle del partido
Lo peor de todo es que, los que estamos fuera del partido pero hemos podido llegar a simpatizar con él en algún momento de nuestra vida, olemos ésto que escribes tú a la legua y que tan sólo ellos, los que mantienen secuestrado al PSC, se creen que no es verdad. El declive del PSC es algo que se masca en el ambiente y deja huérfanos a unos cuantos que no saben ni a quien votar ni quien los escucha. El PSC ha dejado de ser voz para muchos ciudadanos porque mira su ombligo lleno de intereses y ha abandonado al pueblo y a sus sentires y padeceres. Voto porque les encuentren trabajo a estos “secuestradores chusqueros” y dejen hacer a aquellos que se mantienen en el partido por verdadera vocación de escucha y servicio al ciudadano que seguro que hay muchos pero que no pueden actuar por culpa de ese secuestro que ya es un secreto a voces.