Para algunos (normalmente alta dirección política) el ciberactivismo es más parecido al juego Lemmings, imaginan que tienen un ejército de fanboys que irán en la dirección que ellos indiquen en el momento que ellos digan, de la forma que ellos digan y conseguirán los objetivos que ellos han planificado.
… para otros (normalmente los ciberactivistas) es más parecido al juego Commandos, creemos que somos seres autónomos con capacidad de operar en cualquier tema y que estamos al loro de todo. Unos “lonewolfs” capaces de sobrevivir a cualquier debate en la red y con capacidad de construir mejores argumentos que la organización a la que pertenecemos.
La realidad seguramente sea más esta:
Sí, al Monkey Island, nadie sabe muy bien que pasa, y todo es más parecido a una gincana lisérgica con más dosis de frikismo que la que desearíamos reconocer y más divertido de lo que parece a primera vista.