Imagen de Vergara, en el Blog de Público
Los activistas del PP en mitad de campaña están muy crecidos, se ven ganadores y no se conforman con eso, ya pretenden preparar el terreno de cara al futuro gobierno para poder construir una hegemonia cultural.
Una de la línea de trabajo ideológico que están haciendo es alertar que los sindicatos están preparando huelgas generales a tutti-plen cuando ellos lleguen. Es una manera de:
a) Comer la moral a los sindicalistas, poniéndose como víctimas. Sin saber que políticas va a implementar el PP y anticipando que van a estar llenas de recortes y medidas antisociales, quieren poner que las posibles huelgas y protestas que se le hagan son solo de carácter político y porqué el señor Rajoy y los del PP no nos caen bien. Pretende de hecho deslegitimar cualquier huelga que pueda haber.
b) Ponerse la tirita antes de la herida. Así si hay alguna protesta ya han descontado los costes que pueda haber y han cerrado filas entre los suyos para salir a defender las medidas del PP.
Todo dependerá de lo que haga el PP en el gobierno y de la capacidad de diálogo que tenga
Ya lo preguntó el PP a la UGT y esta le contestó que la UGT tenía una serie de propuestas de cara a la creación de empleo (ver documento aquí) y que este era la hoja de ruta que se planteaba. Luego será decisión de quien gobierne seguir algo parecido a esto o lo que él crea que tiene que seguir, que para eso le han votado.
Una organización sindical que pretende liarla parda en el minuto 1 de la nueva legislatura no se reúne con el partido que pretende ganar las elecciones como así ocurrió.
Dependiendo de las decisiones que tome, del talante de querer negociar y trabajar, así tendrá la respuesta sindical. En serio, y por más que le pese a algún militante del PSOE, no hay consignas dentro de los sindicatos para hacerle la vida imposible a los del PP cuando entren.
Los sindicatos reaccionan a políticas, no a partidos
Se puede analizar mirando las respuestas que han habido a diversas huelgas sectoriales autonómicas. CiU, PSC o PP no pueden decir que son peores tratados cuando toman medidas que los sindicatos creen que han de reaccionar a la contra, Lucía Figar (PP, CCAA de Madrid) puede quejarse, pero ella no ha sido peor tratada que Ernest Maragall (PSC, Catalunya) o que Boí Ruiz (CiU, Catalunya). Los sindicatos andaluces han montado movilizaciones de la administración local contra alcaldes de todos los colores, PP, PSOE, andalucista, etc..
Pueden darles la vuelta que quieran pero al final analizando las huelgas y conflictos, se encuentra una proporción parecida.
Huelgas generales en democracia y gobiernos algunas comparativas.
La actual ratio de años de gobierno y huelgas generales recibidas es desfavorable al PSOE. Este ha estado gobernando 21 años, y ha sufrido 4 huelgas generales (85, 88, 94 y 2010), el PP ha gobernado 8 años y ha sufrido 1 huelga general (2002). UCD ha gobernado unos 4 años y sufrió una huelga general de una hora en 1978. De media el PSOE ha sufrido una huelga general cada 5 años, UCD cada 4 años y el PP cada 8 años.
Podríamos pasar a comparar períodos de destrucción de empleo y donde el desempleo tenía niveles a los comparables, inicios de los 90. En esta época también gobernaba el PSOE y se realizó una única huelga general (1994) que sufrió el PSOE. Igual que en esta etapa de destrucción de empleo, el PSOE también ha sufrido una única huelga general.
Responsabilidad sindical
Es algo de lo que tendré que escribir, porqué el trato a los sindicatos durante esta crisis ha sido bastante injusto. Su comportamiento serio en la negociación de los expedientes de regulación de empleo ha permitido salvar, solo en Catalunya 150.000 puestos de trabajo al año durante todo este período de crisis. La firma del acuerdo de pensiones, que ha tenido algunas contrapartidas positivas como la cotización de las prácticas en empresas, es algo que no se ha hecho a coste cero, parte de las bases laborales no lo comparten y es considerado como una pérdida de plumas por el camino.
Aquí no se han montado huelgas generales con la alegría de Francia o Grecia (con unos resultados más que cuestionable) y aunque medidas como la reforma de la Constitución han tenido su reacción en la calle, se ha entendido como funciona la economía y el sistema en el que estamos y se ha evitado al máximo joder el sistema económico. Estaban dispuestos incluso a firmar un contrato único tipo austríaco, algo que los social-liberales consideran la epítome de la flexibilidad laboral.
El argumento de la derecha es que ZP nos tenía sobornado pero esto es algo bastante ridículo, la financiación sindical responde a lógicas que no son arbitrariedades del gobernante de turno (Aznar también daba subvenciones a los sindicatos) y tenemos los sindicatos más infrafinanciados públicamente de nuestro entorno.
Los del PP casi merecerían que en lugar de sindicatos como los actuales se enfrentaran a lo que para la “izquierda verdadera” SL deberían ser los sindicatos o con modelos más sectoriales y supuestamente más combativos tipo francés.
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